sábado, 16 de junio de 2012

LA MUERTE QUE BAUTIZA

Inquieté a la luna en su
oráculo ciego

Ya se cansó de
acariciar los
primates de mi
siembra

Soy un espacio
que dura un instante
sus diurnos habitantes
me devoran en
silencio

Los variados matices
cuando el tiempo
se inclina
entibian los asilos
de las jornadas
que no saben regresar

Mástiles del dolor
y la deshonra
la justifican

Arcas de monedas
violadas

Las estrofas
ya pronuncian
vocablos diferentes

Seres que se
inmolan en público

Para que sea más
procaz alguna
muerte distinta

Ya que ella los
bautizó.-